domingo, 15 de junio de 2008

Marcha

Con respecto a la marcha debemos observar todos los ciclos de la misma , el pie y los movimientos del mismo en la fase de apoyo, los movimientos de la rodilla , su flexión en el apoyo, el impulso y su extensión para preparar la fase siguiente. Los movimientos de la cadera, la pelvis, el raquis y la cintura escapular junto a los miembros superiores.
Los movimientos coordinados de tobillo y rodilla eliminan los ascensos y descensos bruscos del centro de gravedad, permitiendo el desplazamiento del mismo en el plano sagital, el cual se altera cuando falta la flexión de la rodilla. Si la rodilla está en extensión, el movimiento entre tobillo y rodilla dará un movimiento cortante, influyendo en la marcha normal.
Es común que éstos pacientes refieran dolores a nivel de la articulación tibiotarsiana, subastragalina, o en todo el metatarso, a predominio externo. Esto se debe a que por el acto quirúrgico en sí se alinea el miembro con respecto a la cadera y el tobillo cambiando ahora la dirección de la fuerza descendente del miembro incidiendo en el pie.
En la fase de apoyo monopodal, el cuadriceps y el sóleo trabajan en forma sinérgica ya que el sóleo lleva la tibia hacia atrás dando estabilidad en el apoyo monopodal.
Los músculos de la pata de ganso nos dan estabilidad en el plano frontal evitando alteraciones laterales y los isquiotibiales trabajan en la oscilación en el paso y como se necesita la tracción, cuando el miembro busca el apoyo ya que ésta tracción hace que el miembro se frene , se estabiliza en extensión.
Es importante tener en cuenta que a medida que se flexiona la rodilla, el componente rotatorio de los isquiotibiales aumentará, mejorando así la eficacia mecánica llegando al ángulo óptimo de tracción a los 70º de flexión.
Es fundamental trabajar el cuadriceps en fuerza, pero no despreciar a los rotadores de la rodilla . A pesar de todo, los músculos que no trabajan se fortalecen gracias a los mecanismos de contracción simultánea y propagación de energía.
Debemos trabajar en los distintos decúbitos y no olvidarnos que son músculos que trabajan en carga y que al rehabilitarlos lo debemos hacer en carga.
Debemos lograr una correcta ubicación de la pelvis y de la rodilla. Con respecto a los músculos de la pata de ganso sabemos que en la cirugía fueron elongados y que si los estiramos produciremos un aumento del dolor. Estos músculos al estar bien alargados darán buen juego articular, buena base de sustentación y buena carga. Recordar a los músculos monoarticulares de la rodilla y su influencia en la misma, el poplíteo que es rotador interno de tibia y su desajuste originará roce en el compartimiento patelofemoral produciendo un roce de la carilla articular de la rótula con los cóndilos femorales o una desviación del ángulo de tracción del cuádriceps.
Tener en cuenta que cuando una articulación ha estado doliendo por mucho tiempo en la marcha , en el apoyo ha estado limitada en su intensidad y en su duración, al igual que el juego articular y hasta puede haberlo suprimido.
Es importante evaluar ciertos parámetros de la marcha. En carga parcial bipodálica observar bien como esta esa rodilla. ¿Se traba como para permitir el apoyo necesario para que la contralateral avance?¿ Está alineada?, ¿Cómo va a influir esto en las distintas articulaciones del miembro, y si esas carga anómalas son perjudiciales o no para la vida útil de la prótesis?

sábado, 14 de junio de 2008

Balance muscular

Función muscular del Cuadriceps

- Electroestimulación.
- Isometría multi-ángulos.
- Ejercicios activos en cadenas de movimiento (abiertas y cerradas).
- Carga precoz soporte externo.



Función muscular de los Isquiotibiales

- Ejercicios activos en cadenas abiertas de movimiento:
- Ejercitación activa a favor de la gravedad
- Ejercitación activa contra gravedad en D.V.
- Ejercitación activa contra gravedad con resistencia progresiva.







Postoperatorio inmediato:Cicatriz

El paciente se encuentra en la habitación con una valva posterior (o no) , con la rodilla vendada y con el drenaje. Aquí si el paciente lo tolera le enseñamos a controlar su
cuádriceps en forma estática (isometría).
A la 48 hs. Se le retira el drenaje, y aquí buscamos restablecer el ROM y buscar el equilibrio muscular en el menor tiempo posible respetando los ciclos de cicatrización de la herida.
Como sabemos, a los 15 días comienza a proliferar el tejido de granulación, se observa una cicatriz roja debido a la gran vascularización.
El objetivo de esta etapa es evitar el crecimiento excesivo de la misma. Debemos estimular la cicatrización y disminuir el dolor. No separar los bordes de la herida porque eso le agrega tensión a los bordes y estimulamos aún más el crecimiento de la misma favoreciendo la aparición del queloide. El tratamiento adecuado es acercar los bordes de la herida y traccionar la herida porque eso ayuda a disminuir el edema pericicatrizal.
Ya a los 21 días se termina la cicatrización de partes blandas, y aquí debe cambiar la coloración de la cicatriz, la cual se tornará blanca porque comienzan a estrangularse los capilares indicando el cese en el crecimiento de la misma.
Si se evidencia el crecimiento de la cicatriz aún en esta etapa tratar de mantenerse en los conceptos anteriores, estiramiento de la cicatriz en todos los planos, romper las adherencias a planos profundos y masaje transversal profundo. Luego buscamos la desensibilización de la cicatriz.

viernes, 13 de junio de 2008

Diseño de las protesis

Las protesis están diseñadas para permitir una movilidad similar a la de la articulación normal. Los componentes protésicos suelen estar compuestos por un elemento metálico que encaja exactamente en un plástico. Se utilizan diversos metales, acero inoxidable, aleaciones de cobalto, cromo y titanio. El plástico es polietileno que es extremadamente duradero y resistente al desgaste. Para la fijación de los componentes al hueso suele utilizarse cemento, aunque también existen prótesis no cementadas, las cuales se anclan directamente al hueso.
Los patrones que se han utilizado para la fabricación de los implantes se basan en la biomecánica de la rodilla y su propósito es : conseguir una rodilla no natural con el mismo funcionamiento que la fisiológica.
Hemos de tener en cuenta al paciente. Cada individuo requiere un implante y un estudio
pormenorizado de su estado. Este hecho es fundamental e impresindible. La amplia gama de materiales que se presenta ha permitido aconsejar el más indicado en cada uno de los
casos valorando tanto el tipo de implante, como el tipo de enfermo.
La prótesis de rodilla Insall-Burstein ha sido diseñada para su utilización en pacientes que, a juicio del cirujano, dispongan de una buena reserva ósea y una aceptable estabilidad articular en el plano frontal (Varo/Valgo), o cuando se estime conveniente suplir la acción del LCP.

¿POR QUÉ ES NECESARIA UNA PRÓTESIS DE RODILLA?

La razón más frecuente para colocar una prótesis de rodilla es eliminar el dolor y la incapacidad causada por una gran destrucción articular. Las superficies de la articulación pueden estar dañadas por la artrosis, proceso que provoca el desgaste del cartílago articular. La articulación también puede estar dañada por la artritis reumatoidea. En esta enfermedad, la membrana sinovial produce unas sustancias químicas que destruyen el cartílago articular.
Debido al dolor y la rigidez el paciente evita utilizar la articulación. Los músculos que la rodean se debilitan y esto contribuye a dificultar la movilidad de la misma. Cuando la destrucción articular es importante, la prótesis total de rodilla puede permitir al paciente volver a desempeñar sus actividades diarias.
Una vez hecho el diagnóstico se considerará la posibilidad de colocar una prótesis cuando el tratamiento médico-rehabilitador u otras alternativas quirúrgicas hayan fracasado al no conseguir eliminar el dolor y la incapacidad.

Se recomienda el reemplazo de la articulación de la rodilla en los siguientes casos:

  • Osteoartritis o artritis de la rodilla que produce un dolor que no ha logrado responder a una terapia conservadora (AINES prescritos por seis meses o más)

  • Disminución de la función de la rodilla causada por artritis

  • Incapacidad para trabajar, dormir toda la noche y/o caminar más de tres cuadras (bloques) debido al dolor en la rodilla

  • Prótesis de rodilla suelta o floja

  • Algunas fracturas de rodilla